III CONGRESO NACIONAL SOBRE TDAH EN GRANADA

Como ya están colgadas en la red las ponencias del III Congreso Nacional sobre TDAH. Aquí os ponemos un enlace con la página de la Federación Española, por si alguien está interesado. Desde luego merece la pena verlas. . http://www.feaadah.org/ pincháis el enlace y luego entráis en el cartel que anuncia el congreso.

jueves, 6 de mayo de 2010

LA CARRERA DE SAPOS


Hubo una vez una carrera de sapos. El objetivo era llegar a lo alto de una gran torre. Había mucha gente en el lugar para vibrar y gritar por ellos, pero no creían que lo fueran a lograr; así que lo que más se escuchaba era:
-¡Qué pena! Esos sapos no lo van a conseguir... no lo van a conseguir...
Los sapitos comenzaron a desistir. Pero había uno que persistía y continuaba subiendo en busca de la cima.
La multitud continuaba gritando:
-¡Qué pena! No lo vais a conseguir...
Poco a poco iban dándose por vencidos, excepto ese sapito que curiosamente en contra de todos seguía, y llegó a la cima con todo su esfuerzo.
Los otros querían saber cómo lo había hecho y fueron a preguntarle cómo él había conseguido concluir la prueba. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que... ¡Era sordo! (Autor: desconocido)
El poder que tienen las palabras que escuchamos es inmenso, el sapito ganador de esta historia no pudo sentir la desconfianza de los que le rodeaban y eso le hizo capaz de conseguir llegar a su meta.
Muchas veces lograr objetivos o no, depende de la confianza que depositemos en nosotros/as mismos/as y ésta depende a su vez de la confianza que los que nos rodean muestren hacia nosotros.
Esta confianza o desconfianza se traduce en palabras y gestos, en elogios y críticas que pueden respetar o dañar nuestro desarrollo personal.
La población infantil y adolescente es muy receptiva, sensible y vulnerable a la información que reciben de su entorno, son “sapitos” que desafortunadamente no están sordos y esto lo olvidamos los adultos constantemente. Lo olvidamos cuando no cuidamos las palabras con que los definimos; lo olvidamos cuando utilizamos etiquetas (este niño es terrible, es un vago, no vale para estudiar, es un verdadero desastre….); lo olvidamos cuando los comparamos (sois el peor curso del colegio, con tu edad tu hermano ya sabía hacerlo solo…), lo olvidamos cuando les humillamos (parece que estás tonto); lo olvidamos cuando les agredimos (hasta que no te doy una torta no quedas tranquilo).
Un/a niño/a, un adolescente -y hasta un adulto-no aprenderá a quererse a sí mism@ si lo que constantemente oye y percibe de los que le rodean son comentarios y actitudes negativas sobre ell@s mism@s. La imagen interior que se hará de si mism@ será negativa, su seguridad y su autoestima ya habrán quedado lastimadas.
Las personas ejercemos una influencia innegable sobre los que nos rodean. Los adultos podemos tener una influencia extraordinaria sobre nuestros jóvenes y/o niñ@s. Este efecto en psicología se llama el Efecto Pigmalión, su nombre responde a una historia en la que un príncipe de la mitología griega y romana esculpió en marfíl una estatua de mujer ideal. Tan hermosa y tan natural fue su creación que se enamoró de la estatua. La creencia en su amor hizo que la estatua adquiriera vida.
“La creencia en”… esa es la clave, infundir confianza es fundamental para desarrollar una personalidad sana en nuestr@s niñ@s y adolescentes, es importante por ello que tanto padres/madre como profesores/as revisemos nuestras expectativas y tratemos de que éstas sean constructivas teniendo en cuenta que, tanto si son negativas como si son positivas, lo más probable es que se cumplan.
Es un gran poder el que tenemos y por lo mismo una gran responsabilidad, que no es ejercida con la frecuencia e intensidad que deberíamos, actuamos en demasiadas ocasiones como el público que “animaban” a los sapos en la carrera a la vez que desconfiaban de los resultados que pudieran conseguir. Nosotros también “animamos” constantemente a nuestros chic@s, a la vez que les transmitimos una clara desconfianza en lo que pueden lograr.
“Los niños tienen más necesidad de modelos que de críticos”. Carolyn Cotas.
Carmen Villaverde - PSICÓLOGA
Colaboradora de ADAHIAS

domingo, 2 de mayo de 2010

ACUERDO SOBRE TDAH (Mª José Díez Alonso)

No es frecuente, que ante temas controvertidos y separados por una gran distancia, haya una gran coincidencia entre profesionales y afectados –en este caso por TDA-, sin embargo, algo está cambiando: hace tan sólo dos semanas ADAHIAS (Asociación de Afectados por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad de Astorga), organizaba una Mesa Redonda en la que Victorina Alonso, como Procuradora en las Cortes Regionales, nos presentaba la Proposición no de Ley que había sido aprobada en el mes de marzo por los tres Grupos Parlamentarios (hecho histórico porque nunca se había alcanzado tal acuerdo y consenso), y que supone una atención integral y coordinada a los afectados por TDA y a sus familias.
Una semana después, se ha celebrado en Granada el III Congreso Nacional sobre TDAH, con el título: “CRECIENDO CON EL TDAH: ADOLESCENTES Y ADULTOS”, y leo, con satisfacción, que las conclusiones y las demandas que hacemos los afectados y los profesionales, coinciden plenamente, lo mismo en Granada que en Astorga, lo mismo a nivel nacional que local, lo mismo las “autoridades nacionales” que los modestos profesionales que colaboramos con pequeñas asociaciones como ADAHIAS.
Las familias y los profesionales pedimos:
• Que no se dude de la “verdadera existencia” del TDAH: no es un trastorno inventado, es conocido desde la Antigüedad, estudiado desde el s. XIX e incluido en el DSM desde 1982.
• Es preciso avanzar más en el estudio del trastorno a lo largo de la vida: los adultos afectados necesitan soluciones a sus problemas personales, familiares, sociales, laborales,...
• Solicitamos el apoyo económico a las familias para hacer frente a los tratamientos psicológicos y psicopedagógicos, así, como que los medicamentos se incluyan en el grupo de aportación reducida, no olvidemos que es un trastorno crónico.
• Deben establecerse unos Protocolos Diagnósticos y de Intervención Integral en materia sanitaria, educativa y de servicios sociales.
• Trabajar con y por las familias: facilitándoles apoyo psicológico, así, como el acceso a los recursos económicos y formativos necesarios.
• Apoyar y apoyarse en el movimiento asociativo: la asociación es una plataforma única para canalizar todas las necesidades del presente y las ilusiones de un futuro mejor.
Que exista acuerdo, no sólo es bueno, también es necesario, para que las personas afectadas por TDA y sus familias dejen de “ser invisibles”, y tengan la atención que merecen, no por ser TDA, sino por ser PERSONAS.
Mª José Díez Alonso – Psicóloga
Colaboradora ADAHIAS